Lehman se dispone a invertir en hipotecas y créditos para poder pagar más dinero a sus acreedores.
Este conglomerado de operaciones a realizar fue aprobado por el tribunal que tiene a cargo su liquidación. Asimismo, Lehman gastará 1.400 millones de dólares comprando activos de su filial insolvente Lehman Brothers Bankhaus, en búsqueda de un rendimiento a cinco años. La justificación que se da para realizar estas operaciones, es que si la empresa no seguiría con sus actividades, sólo se habría rescatado hasta 20.000 millones, y con estos movimientos se espera devolver hasta casi 50.000 millones.
Estos activos alemanes están nominados en 3.500 millones de dólares. No obstante, el precio actual está por debajo del 50% y se pretende que dicho valor aumente progresivamente con el pasar del tiempo.
Pero también hay otra postura acerca de esta jugada. Álvarez & Marsal tiene un contrato con Lehman donde recibirá un bonus de 0,175% de todas las cantidades superiores a 15.000 millones de dólares que recupere. De esta manera, la firma podría abastecerse de 50 millones de dólares mediante el recupero previsto.
Sin embargo, se supone que el código de quiebras empresariales no le da autoridad para invertir a través del dinero de los acreedores. Es decir que, Marsal está metiéndose en un terreno pantanoso y de difícil recorrido.
Cabe aclarar que, se estima una sumatoria de acreedores de alrededor de 830.000 millones, y con los 50.000 que proyecta recuperar Marsal, aún estamos lejos de satisfacer las demandas.
